Resurrección que trae muerte

¿Porque me sigues haciendo daño?, ¿cuanto es tu odio hacia mi?, ¿porque?, ¿lo merezco?, muchas dudas, mucha rabia, rabia y pena. Prometí no hacerme mas daño, te aleje cuanto y como pude, congele la llama que ardía y me quemaba a diario, no sabes cuanto me costo congelarla y ahora vienes e intetas derretirla. Que tu si sea si y tu no sea no, deja de jugar, deja de hacerme fantasear con lo que no es. Ya lloré lo que debía llorar porque insistes en que te llore un mar, ¿porque?. No tienes compasión, amor porsupuesto que no pero nisiquiera compasión. Me dueles mas que cualquier herida, dueles mas que la sal en las mismas, dueles lo que no digo, dueles mi sepulcral silencio, dueles estomago, alma y garganta. Me rearme y me desarmas, buscas mi mal a como de lugar, DETENTE, que ya no doy mas, DETENTE, siento que voy a desmayar. ¿Porque diablos cuatro veces no son suficientes para entender?, ¿porque no asumo que ya fué?, si todo es al fin y al cabo una tontería más, como tantas otras, de las que vienen y van ¿acaso no lo dijiste?. Cuando al fin una luz pura, sincera y compasiva se acerca y me convence de que todo tiene un sentido, de que todo valio la pena vivir, de que me servira de algun modo, cuando pienso que puedo amar y ser feliz, vienes y destruyes TODO luego te vas sonriente.
Una vida a medias no es vida... que paso ¿te aburriste de tus insustanciales compañias? ¿quieres jugar a ver como caigo? o ¿quieres ver cuanto duro de pie?, Sabes que me tienes en tus manos, pero aún allí, habitando en ellas puedo pensar con claridad, puedo entender tu plan, ya no creo en las buenas intenciones, ya no creo en el arrepentimiento mas si creo en el placer, en el goce, el disfrutar de ver como ese cristal se parte en tres, en cuatro o en mil pedazos.
No te enorgullezcas, no te jactes que aunque sienta lo que sienta, lo domino mejor que a mi propia voz. Creo que cuatro no fueron suficientes, no necesito de tu quinta, ya me la dije unas mil veces. Aunque logres confundirme y que un diluvio aparezca por mis ojos, tengo bastante claro que no soy ni seré nada valioso para ti nunca, jamás. Siempre seré ese recuerdo que aparece en la nostalgia o el juego que entretiene por unas horas...
Pero ya se acerca el tiempo en el cual decidiré arriesgar y no temer, alrededor no todo es dañino, no todo es toxico, la luz pura se hace presente en mis tinieblas y mis sombras, la luz inocente espera el día que me atreva a comenzar.